POR
JOSÉ RAMÓN FDEZ.-TRESGUERRES
|
Turbera de La Molina desde La Pereda |
Cuando salimos para Tineo en
La Espina seguía soplando el viento y hacía un frío de mil demonios. Dice la gente de aquí que lleva así varios días y el
cielo no presagia nada bueno. Unos nubarrones negros oscurecen el paisaje y por
delante tenemos más de 11 km de camino. No quiero dejarme llevar por los prejuicios pero
creo entender por qué el Cristo de la ermita a la que nos encaminamos recibe el
nombre de Los Afligidos. Para llegar hasta allí primero es preciso dejar atrás
el entronque de la N-634 con la AS-216. A partir de aquí ninguna carretera
nacional más se interpondrá en nuestro camino, lo que nos alivia.
|
Cristo de los Afligidos en La Pereda |
En
la actualidad el cruce se ha duplicado. Poco después del antiguo, que hay junto
a Casa Cándano, se ha construido una rotonda nueva de la que parte la autovía a
Oviedo. Casa Cándano es un bar tienda con gran tradición en el
comercio salense. Todas las sierras que se ven en la lejanía, la de Begega y La
Manteca entre otras, están cubiertas de nieve. En algún punto, cuando las
nubes lo permitieron, he visto los Picos de Europa o el Macizo de Ubiña, no lo tengo claro. En el cruce nos desviamos a
la derecha de la carretera por un camino que discurre paralela a ésta, hasta La
Pereda. La parroquia agrupa, además, a las poblaciones de El Rañadoiro y La
Millariega a las que se unen otros caseríos dispersos.
|
Fuente de Reconco de 1809 |
Al
ganar un poco de altura se intuye la famosa turbera de La Molina. Este espacio
natural declarado Lugar de Importancia Comunitaria se incluye en la Red Natura
2000. En época romana fue un embalse utilizado en las explotaciones auríferas.
Su interés actual deriva de los tres taxones que allí se encuentran: el
esfagno, un tipo de musgo, el lagarto verdinegro y la lagartija rabilarga. Es un
buen refugio para las aves en época invernal.
|
Camino a La Millariega |
El
Cristo de los Afligidos, por el que pasamos al poco de iniciar la ruta es una
pequeña capilla del siglo XV de aspecto rústico. Hecha en piedra, de planta
cuadrada y pequeñas dimensiones, fue restaurada en el año 1997. Si queremos ver
alguno más de los elementos interesantes del pueblo, como su iglesia
parroquial o la fuente de Reconco, conviene seguir las marcas pues es fácil
perderse por las callejas. La iglesia parroquial está en la carretera por lo
que tendremos que descender y desviarnos algunos metros.
|
Iglesia Justo y Pastor en Pedregal |
Conviene
también tener precaución con algunos perros, que parecen querer recordarnos las
duras condiciones sufridas por los peregrinos medievales. Los canes campan
aquí con total libertad e impunidad. El primer tramo de tierra que iniciamos, el que nos lleva hacia La Millariega, también recuerda lo duro del peregrinaje
compostelano. No es, de todas formas, ni de lejos, el barrizal que nos espera
poco más adelante y que todavía ni sospechamos. Cuando regresamos al asfalto,
después de La Millariega y antes de El Pedregal, comienza a chispear. Hoy
parece confabularse todo en contra nuestra. ¿Acaso pensábamos llegar a
Santiago sin mojarnos?
|
Crucero y casa de La Torre en Pedregal |
Pasamos
junto a la iglesia de los santos Justo y Pastor de finales del siglo XV. La parroquia fue filial de la de Tineo y se sitúa bajo la sierra homónima y la de
La Curiscada que nos acompañarán el resto del camino hasta la capital
municipal. La iglesia tiene un pórtico de piedra de tres arcos donde dudamos
refugiarnos durante un tiempo. Sobre la sierra de Tineo los molinos de viento
producen energía sin parar gracias a un viento persistente. Estas montañas son zona de transición climática en donde parece aumentan las precipitaciones.
|
Se inicia el barrizal |
A
la salida de Pedregal se deja de nuevo el asfalto y ya no volveremos a él hasta
el final del recorrido. Lo hacemos por la derecha de la carretera. En un punto
fácil de identificar por el crucero de piedra y la casa de La Torre.
Por detrás de ella iniciamos el nuevo barrizal. La casa fue hospital de peregrinos
hasta principios del siglo XX. Aunque el barro es mayor al principio, para meter presión, el resto del camino no desaparece del todo. De vez en cuando nos obliga a
hundirnos hasta el tobillo. Luego supe que el asunto es de sobra conocido por todo peregrino que se precie. Parece el equivalente a la etapa de los adoquines del Tour de Francia.
|
Paisaje camino de Tineo |
El
tramo, de alrededor de 4 km, es de una belleza
incontestable. Avanzamos flanqueados por muros de piedra cubiertos de musgos, entre arboleda. Se contemplan extensas y verdes praderas alargandose hasta las nevadas montañas del sureste. Encima de los prados surgen, de
pronto, las variopintas naves del polígono industrial de La Curiscada. Ocuparán el plano medio del paisaje hasta divisar la población de Santa Eulalia. Ambos irán quedando a un lado, por la izquierda del itinerario.
|
Polígono industrial de La Curiscada |
|
Camino de Tineo |
|
Camino de Tineo |
|
Polígono industrial de La Curiscada |
|
Sta. Eulalia de Tineo |
En
Santa Eulalia hubo durante la guerra civil un aeródromo que en la actualidad da
servicio a los aviones de extinción de incendios. Estamos a 3 km
de la villa de Tineo donde esperamos finalizar pronto la dura jornada. El
nombre de Tineo parece proceder del antropónimo latino Tinaius o Tineius. Se
entra en la capital por las instalaciones deportivas que superamos para
alcanzar el conocido campo de San Roque. Aquí se celebra una fiesta todos los 16
de agosto. Hay una ermita desde el siglo XV que alberga al santo. En el escudo
de la fachada figuran las conchas del peregrino. En su interior una pequeña
imagen policromada de San Roque con su perro preside el altar.
|
Campo de San Roque |
|
Capilla de San Roque |
Hay
que seguir por el Paseo de los Frailes que se ofrece como un balcón comunal al
paisaje y a la villa tinetense. Una moderna escultura homenajea al peregrino y no
puedo dejar pasar la ocasión de inmortalizarme junto a ella. Tineo se asienta
sobre las laderas de la sierra homónima. Está orientada al mediodía. Ocupó,
históricamente, el territorio astur de los Pesicos y recibió su carta puebla en
el siglo XIII.
|
Escultura del peregrino y Palacio de García en Tineo |
La
climatología adversa ha ido apagando el día. Aprovecho sus últimas luces para
deambular por las calles en busca de su destacado patrimonio. Delante de la
iglesia parroquial hay un bonito crucero. La iglesia ha sufrido a lo largo del
tiempo multitud de transformaciones que la han hecho perder buena parte de su
identidad. En la actualidad alberga un museo de arte sacro que es necesario
visitar. En su proximidad se encuentra uno de los edificios más notables de la
villa convertido en Casa de Cultura, el palacio de los García. Con elementos del
s. XVI tiene en su parte posterior una torre cilíndrica del XIII. El palacio de
los Merás, del siglo XVI, es en la actualidad un hotel de cuatro estrellas que
recibe el nombre de Albergue de peregrinos Palacio de Merás. Se encuentra muy
próximo al ayuntamiento.
|
Tineo desde el Paseo de los Frailes
|
Altitud de salida: 660 m
Altitud más elevada: 799 m
Altitud de llegada: 660 m
Distancia a recorrer: 11,7 km
Tiempo estimado: 3:10 h
AUTOR
DE TEXTO Y FOTOS JOSÉ RAMÓN FDEZ.-TRESGUERRES
No hay comentarios:
Publicar un comentario