Hoy incluyo una sencilla ruta, de longitud media, que no dejará indiferente a
quién se anime a recorrerla. Seguiremos el curso del río Ebro entre las
localidades burgalesas de Valdelateja y Orbaneja del Castillo. El Ebro,
que he tenido la suerte de recorrer desde su nacimiento en Fontibre hasta su
desembocadura en el delta de los Alfaques, fue el gran río en cuyas orillas se
asentaron los antiguos pobladores de la península ibérica. Existe otra iberia,
en la actual república de Georgia, entre los montes Ararat y Cáucaso, de la que
parece procederían los Íberos hispánicos.
En este tramo, el
Ebro se encaja en las calizas y margas cretácicas de los
páramos de La Lora y de Bricia hasta superar los 300 m de desnivel. Tras la declaración del Parque Natural
de las Hoces del Alto Ebro y Rudrón la zona se encuentra protegida. El parque se constituyó en el año 2008 y
abarca una superficie total de más de 46 mil ha pertenecientes a unos 9
municipios burgaleses. Su proclamación generó cierta polémica al considerar algunos colectivos que ésta era incompatible con la existencia de aerogeneradores en el territorio.
El interés del espacio natural radica en la flora y
fauna que lo habita. Entre la flora destaca la vegetación de ribera, el bosque
mediterráneo (encina y quejigo), junto a especies atlánticas como el haya. De su fauna resalto las diferentes rapaces, como el buitre, el alimoche
o distintas variedades de águilas. Los vertebrados censados constatan la presencia de lobos, jabalíes o nutrias, entre otros.
Valdelateja,
nuestro punto de partida, está asentada en el valle de Sedano. Es, hoy, una
bonita localidad que en los últimos años ha conocido un auge gracias a la
recuperación de su caserío y al desarrollo del turismo rural. Situada a orillas
del Rudrón, conserva un interesante puente de piedra, una pequeña iglesia y una
ermita dedicada a Santa Centola, una de las más antiguas de la provincia. El santuario se encuentra sobre la peña de Castrosiero, en las inmediaciones del
pueblo.
El
Rudrón, afluente del Ebro, discurre a lo largo de 42 km entre Basconcillos del
Tozo y Valdelateja, lugar de confluencia de ambos ríos. Parece que su nombre procedería
de un hidrónimo de origen íbero-vasco Ur-on con significado de agua buena. Pero
ya se sabe que para esto de los nombres siempre existen diversas explicaciones, algunas incluso más o menos peregrinas.
Cañón del Ebro |
Atravesamos
el Ebro por un puente de piedra y hormigón que nos cruza a la margen izquierda. El camino
desde Valdelateja, algo más de 4 km, ha transcurrido, en su totalidad, por la
orilla opuesta. Estamos en la central hidroeléctrica El Porvenir en donde
nuestro camino retornará en el sentido contrario al que traíamos, en dirección a Orbaneja. También es posible alcanzar esta localidad por Pesquera de Ebro y Turzo
(GR-99) pero el recorrido se alarga de forma considerable, algo más de 25 km.
En
la central el agua y el barro que se forma en sus inmediaciones nos regala con
una profusión de mariposas que nos deja impresionados. Licénidos, ninfálidos,
piéridos… todos compiten por atraer los objetivos fotográficos. Los odonátos son otra de las manifestaciones más numerosas de la fauna de la comarca. La ruta se encamina, ahora, hacia la ermita de Nuestra señora del Ebro, triste lugar en cuyas proximidades fallecieron una decena de personas al descender en barca
por el canal que alimenta la central. Este curso de agua artificial fue construido en el año
1910 y el luctuoso suceso tuvo lugar durante la guerra civil española.
Ninfa de los arroyos |
Hembra de Calopteryx |
Escalada |
Orbaneja del Castillo |
Orbaneja
del Castillo, de origen medieval, está declarada Conjunto histórico. En su día
albergó una población de origen árabe, cristiana y judía. Geográficamente está
situada sobre una estructura tobácea atravesada por un pequeño arroyo que
desde el pueblo se precipita en cascada hacia el Ebro. En su veloz descenso el
agua ha creado diversas pozas al formarse pequeños cierres
naturales con toba calcárea. La toba, roca muy porosa, se genera por la
unión de carbonato cálcico, originado por la disolución de la caliza, con
restos vegetales. Frente al pueblo destacan los famosos cortados de La Lora con
caprichosas formas que, según comentarios, semejan el mapa de África o las cabezas de dos camellos
besándose.
Si
haces la ruta de las Hoces del Ebro y no visitas el pueblo de Orbaneja del
Castillo estarás obligado a repetirla. El remordimiento de haber ignorado tan
hermoso lugar no te dejará descansar en paz hasta que lo hagas. En sus callejas
se rodó la película “El disputado voto del señor Cayo” basada en una obra de
Miguel Delibes.
AUTOR
DE TEXTO JOSÉ RAMÓN FDEZ.-TRESGUERRES Y FOTOS JOSÉ RAMÓN FDEZ.-TRESGUERRES Y
O. MATA
1 comentario:
Una excursión especial y mágica
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