Aramo Excursiones: Camino del Salvador. Tramo Pola de Lena-Mieres

POR JOSÉ RAMÓN FDEZ.-TRESGUERRES

Aramo camino de Villayana

Salgo de Pola de Lena sabiendo que los casi 14 km que median hasta Mieres del camino no van a ser los más lucidos del recorrido hasta San Salvador de Oviedo. Hace muchos años que el Valle del Caudal cambió naturaleza por cemento y asfalto. Ni el río Lena, primero, ni el Caudal, después, dan ya pesca a los pueblos ribereños ni placidez al caminante. El salmón, abundante no hace tanto tiempo, sigue sin regresar a estas aguas castigadas por la industrialización y el desarrollo urbano. El itinerario tradicional seguía la actual carretera AS-242 pero en los últimos años, buscando recorridos más tranquilos, se ha desviado por la carretera paralela que da servicio al polígono industrial de Villayana.

Polígono industrial

Recorro los cuatro primeros kilómetros hasta esa población entre autopista y naves industriales. Hay que tener cierta capacidad de éxtasis para olvidarse de todo cuanto te rodea. Pienso que llegarán tiempos mejores. Seguramente cuando seamos capaces de armonizar desarrollo y naturaleza sin causar tantos daños y perjuicios como provocamos en la actualidad. Algunos países lo han conseguido por lo que no parece algo imposible de alcanzar. Confío en ello porque también he conocido tiempos peores. He visto un río Caudal hecho una auténtica cloaca. Un río en el que sólo las ratas eran capaces de sobrevivir entre tanta inmundicia. Ahora las cosas todavía parecen tener difícil arreglo.

Villayana

Río Lena desde puente de Villayana

Entre pensamientos, deseos y proyectos alcanzo Villayana en un tiempo record, poco más de cuarenta minutos. Esta cabecera parroquial está situada entre Pola de Lena y Ujo. Hay infinidad de pueblos que en Asturias, y en otras partes de España, llevan el nombre de Villa. Las acompaña, casi siempre, un sobrenombre que aporta algo más de información sobre la misma. Lo suyo, en este caso, es pensar de inmediato en una topografía plana que justifique su denominación. Otras teorías, sin embargo, derivan el topónimo de villa juliana, por ser Santa Xuliana la que daba designación al viejo camino. Me voy con las mismas dudas con las que he llegado gracias a los filólogos.

San Martín de Villayana

Nuestra Señora de la Alberguería en Villayana

Ntra. Sra. de la Alberguería en Villayana

Villayana es la típica población surgida a ambos lados de una vía de comunicación, el camín real. Creció sin armonía ni belleza, al menos en la actualidad exterioriza escasa gracia. Había en el lugar hospital de peregrinos y alberguería, hoy apenas un lugar donde tomar un café. En el reducido casco antiguo se encuentra la iglesia de San Martín y al salir a la carretera general el edificio en el que se encontraba el hospital de peregrinos de Nuestra Señora de la Alberguería, del siglo XVI. La iglesia fue prerrománica en origen. Lo más antiguo que se conserva es su entrada y el retablo de su interior, del siglo XVII. El pueblo cuenta, además, con diversas naves industriales que mantienen algo del empleo que hace años abundaba por toda la comarca y algunas viviendas de nuevo cuño.

Puente de Ujo

Chalet de los Geólogos

Casi sin apenas tiempo ni distancia, alrededor de tres kilómetros, se llega a Ujo. Al tener que hacerlo por carretera peligrosa privada de arcén, tengo la sensación de que el trayecto ha durado una eternidad. Acabo de entrar en el concejo de Mieres y dejo atrás el de Lena. Dicen que el nombre de esa localidad procede del término latino ostium, con el significado de puerta. Por su situación topográfica, en un lugar en el que se unen valles y ríos, parece tener ciertos visos de fiabilidad. Accedo a Ujo, tierra de mis antepasados, contemplando el chalet de los geólogos, antiguas oficinas de la Hullera Española. No sigo las indicaciones que me derivan por la senda fluvial que va rodeando el pueblo y voy por el interior del mismo, por la antigua ruta. Recomiendo hacer otro tanto a cualquiera que peregrine a San Salvador de Oviedo.

Santa Eulalia de Ujo

Cuarteles de Ujo

Ujo guarda muestras de arquitectura civil y religiosa de cierto interés y renombre. De ellas destacaría la iglesia de Santa Eulalia que, aunque muy transformada, sigue mereciendo el desvío. De estilo románico, siglo XII, mantiene de ese período algunos elementos como el ábside. Poco después se encuentra un magnífico ejemplo de vivienda obrera levantada por la Hullera Española para sus trabajadores. Son los conocidos como cuarteles o Colomines de Ujo. Según diversos autores paradigma del paternalismo empresarial desarrollado por el Marqués de Comillas, su impulsor. Dejo atrás la Vega de Ujo y los restos de la fábrica de chocolates Agustina, fundada por mis abuelos a principios del siglo XX. Hoy amenaza ruina y paso casi sin mirar para evitar los recuerdos de la infancia. A la salida del pueblo retomo la actual senda fluvial por la que continúa el resto del camino hasta Mieres.

Camino en Reicastro

Puente de Figaredo en Reicastro

Operarios del Ayuntamiento se esfuerzan en la faena de adecentar cunetas y parterres. Hasta que no finalicen la tarea transito por una vereda rodeada por un tupido cercado vegetal que le quita buena parte de lo artificioso al camino. Lástima no haber optado, en su día, por otro tratamiento más natural y menos costoso para la superficie de la senda en lugar del duro y poco agraciado asfalto. En Reicastro, donde hace algunos años aún se elevaba la escombrera de las minas de Figaredo, existe todavía un interesante puente de hierro. Durante años permitió el paso sobre el río Caudal a los vagones de estériles de la citada empresa. En la actualidad ha cambiado su uso por el peatonal. Desde allí observo, en la distancia, el chalet de la familia Figaredo, propietarios de las citadas minas.

Puente de Santullano

El Pedrosu desde el Camino

El puente de Santullano fue construido en el siglo XVIII por iniciativa de Jovellanos. Como la mayoría de los puentes ha sufrido importantes transformaciones. Las riadas, las guerras, la adaptación al tiempo y a los nuevos tráficos obligó a ello. Cerca del puente se conserva un antiguo palomar restaurado y poco más allá está la intersección con el famoso Valle de Valdecuna. En él se encuentra la ermita de los mártires de San Cosme y San Damián y fue lugar de intensa resistencia antifranquista. Al inicio del valle se asienta la población de El Pedrosu, visible desde la senda.

Polígono de Gonzalín en Mieres

Puente de La Perra

Estamos a tan sólo tres kilómetros del centro de Mieres. Para acceder a la villa debemos atravesar el polígono industrial de Gonzalín y alcanzar el viejo puente de la Perra. Muy transformado, ha sido convertido, también, en paso peatonal. Recibió su nombre por ser lugar de pago de impuesto de pontaje. Durante muchos años una perra gorda era el pago establecido. Me queda, sólo, el habitual callejeo por el interior de una villa de cierta entidad, como Mieres, antes de alcanzar el final del recorrido.