POR JOSÉ RAMÓN FDEZ.-TRESGUERRES
El Cornón, de 2.188 m, es una
montaña a la que conviene tenerle cierto respeto, especialmente en
invierno. Junto con la Peña Orniz constituye el techo del occidente astur. Su
forma piramidal, o de cuerno como indica su nombre, representa un verdadero
icono montañero. Hace de límite entre los municipios de Somiedo, en Asturias, y
de Laciana, en León. A su cumbre se puede llegar por distintos itinerarios. Todos
ellos tras recorrer distancias importantes que debemos tener en cuenta, a pesar
de que algunos estén balizados como Pequeños Recorridos. El más habitual es el
PR-AS-10 que parte desde la localidad de Santa María, en el alto del puerto de
Somiedo.
Esta población, hoy en día muy
transformada, era originalmente una braña vaqueira que se abandonaba durante el
invierno. Quedaba allí, tan sólo, el vecindeiro que se encargaba de velar por
las casas y por las personas que durante esa época del año se aventuraban por
aquellos inhóspitos parajes. En su día, así la conocí. En la actualidad cuenta
con residentes todo el año y su caserío se ha visto muy transformado perdiendo
parte de su imagen tradicional y de su idiosincrasia.
El Cornón era una montaña a la que
en la década de los setenta del siglo pasado no se acudía en masa, salvo cuando
era objeto de deseo del algún grupo de montaña de los que existían en aquellos
años. Por el contrario, en la actualidad, es fácil que en cualquier época tengamos que compartir su reducida cumbre con muchos aficionados a la
montaña. Sin embargo, y como señalaba al inicio de esta entrada, conviene
seguir afrontándola con seriedad, especialmente si el recorrido lo efectuamos
en invierno.
Su forma y situación, libre de
cualquier protección, la hace proclive a sufrir las inclemencias del tiempo,
muy rigurosas en invierno, contribuyendo a dificultar su ascenso. No es raro tener que echar mano de piolet y crampones cuando la
nieve, por la acción del viento y la influencia del clima continental de León,
convierte sus inclinadas laderas en una verdadera pirámide helada. La
niebla y el viento son, también, dos
condicionantes a tener en cuenta cuando decidamos coronarla en esos meses invernales.
Penouta camino de La Mozarra |
Subida al collado de La Mozarra |
Llegando al Boquete de la Mozarra |
Cornón desde Boquete de la Mozarra |
Cornón y Pico Aspia |
En nuestro ascenso la niebla se cerraba y disipaba haciendo mágica la estancia en la cumbre. Sin embargo el viento, muy fuerte y frío, no invitaba a prolongar la estancia. La cima ofrece vistas sobre las
vegas que atravesamos en el camino de subida. Distinguimos algunas pequeñas lagunas que
hemos visitado al venir y que disfrutaremos otra vez al regreso.
Al norte el
valle de Las Zrezales y las cumbres que rodean el valle del Pigüeña. Por el este
todas las cimas destacadas de Somiedo hasta el Macizo de Ubiña. Las nubes bajas
recortan la parte cimera de las mismas. Al sur los valles de Sosas de Laciana y
el Glacheiru alcanzando hasta el embalse de Las Rozas en Villablino. Los
colores ocres del otoño se mezclan con los verdes de algunos pastizales del entorno
que dominan estos incomparables paisajes somedanos.
Subida final al Cornón |
AUTOR DE TEXTO JOSÉ RAMÓN FDEZ.-TRESGUERRES DE LAS FOTOS JOSÉ RAMÓN
FDEZ.-TRESGUERRES Y S. RECIO
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